Durante los años 90, era común compartir diariamente enlaces con notas hacia otras páginas por los «pocos» usuarios de internet que había en aquellos momentos. Con el paso del tiempo, allá por el año 1998, comenzaron a popularizarse los primeros servicios de Blogs, como Open Diary, el mítico LiveJournal y el famoso Blogger. Y es que hasta ese momento y durante años después, las publicaciones se realizaban mayoritariamente editando código en HTML y subiéndolo a internet por medio de un programa de FTP (con la consiguiente extrema lentitud de las conexiones que caracterizaba aquella época).
Herramientas como Blogger o LiveJournal se pusieron en funcionamiento a finales de los 90, aunque su pleno auge lo tuvieron a partir de 2005, y permitieron que internautas de los diferentes puntos de la geografía mundial, sin poseer absolutamente ningún conocimiento de programación, pudiesen publicar en la red de forma fácil y rápida sus ideas, pensamientos y reflexiones, por lo que surgió la primera comunidad de bloggers.
Y es justo a finales de mayo de 2003 cuando se hace el lanzamiento oficial del CMS WordPress, y desde ese mismo instante tuvo una acogida que batió récords y rompió todo tipo de expectativas. Tal es así, que no ha parado de subir en descargas e instalaciones hasta nuestros días, y lo cierto es que en la actualidad aproximadamente el 25% de la totalidad de sitios web de internet están desarrollados y apoyados por esta plataforma.
Aunque cada vez son más fáciles y rápidas las instalaciones de WordPress, es necesario y recomendable mantenerlo siempre actualizado y desarrollar el portal atendiendo a criterios de SEO (posicionamiento en buscadores), accesibilidad y correcta puesta a punto del theme. Estos y otros elementos, unidos a contenido original y al día, harán que conseguir buenos resultados con esta plataforma sea totalmente factible con pocos recursos, ahorrando tiempo, dinero y esfuerzo, centrándote únicamente en disfrutar de las ventajas que ofrece WordPress.
